Valoración primaria y secundaria en primeros auxilios: ¿cómo se hace?

👉Puntos clave

Antes de asistir a la víctima, se aplica la regla P.A.S. (Proteger, Avisar, Socorrer) para asegurar la zona y garantizar la ayuda.

En la valoración primaria, se revisan los signos vitales del paciente y se le reanima en caso de que sea necesario.

La valoración secundaria se realiza tras estabilizar al afectado, revisando cabeza, cuello, tórax, abdomen y extremidades.

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Escrito por Alicia Pardo Crego
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Salud
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12 de septiembre de 2023
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Ante accidentes graves, una actuación rápida puede suponer la diferencia entre la vida y la muerte. Por eso es importante dominar los primeros auxilios y su valoración primaria y secundaria, dos fases de revisión y tratamientos pensadas para ayudar a la víctima mientras se espera a que lleguen los/as especialistas médicos/as.

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Valoración primaria: todo lo que debes saber

Como bien indica su nombre, la valoración primaria en primeros auxilios va antes que la secundaria. Se trata de una revisión de los signos básicos del/la paciente, y de la consecuente actuación para estabilizarlos y minimizar su riesgo de fallecer.

Sin embargo, antes incluso de acercarnos a la víctima, hay que tener en cuenta las indicaciones que da el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST). Este órgano público resume en una regla mnemotécnica los pasos de actuación: Proteger, Avisar y Socorrer (P.A.S.). Es decir, garantizar que la escena del accidente es segura, llamar a los servicios sanitarios y —ahora sí—, realizar la valoración primaria. ¡Atento/a a los pasos!

Evaluación de la escena

Poner las señales de emergencia en la carretera, mirar si un coche accidentado tiene riesgo de arder o explotar, si el árbol que se ha partido tiene alguna parte aún suspendida… Analizar el lugar de la catástrofe, como ves, es clave para evitar convertirse en una víctima más del accidente.

En las siglas del INSST, se corresponde con la P de “proteger”, y debe realizarse tratando de mantener la calma, como ocurre en el triaje en emergencias. En resumen, estos son los aspectos que hay que comprobar:

  • ¿Puedo aproximarme sin peligro?
  • ¿Cuál es el número de víctimas?
  • ¿Qué ha pasado?
  • ¿Están avisados los servicios de emergencia?

Comprobación de la conciencia

Ahora toca evaluar todos los aspectos que puedan comprometer seriamente la vida de la persona. Empezando por si está consciente, ya que eso descartaría una obstrucción de las vías aéreas.

Hay que tratar de que el/la accidentado/a hable y, si no lo hace, provocarle algún tipo de reacción con técnicas suaves. Ten en cuenta que puede haber sufrido daños en la columna y que cualquier movimiento podría provocar daños irreversibles.

Si la víctima no habla, se le puede provocar un pequeño estímulo de dolor para ver si responde

Con esto en mente, los/as profesionales aconsejan realizar un pequeño pellizco o soplo en el rostro para tratar de detectar respuesta. Si no la hay, se debe pasar al siguiente nivel: ver si respira.

Valoración de la respiración

Para determinar si hay fallos en la respiración, se debe acercar la mejilla a la boca de la víctima para ver si exhala calor o escuchamos sus inspiraciones. También hay que observarle el pecho, concluyendo si se mueve o no. Pueden ocurrir dos cosas:

El/la paciente respira

Se mide la frecuencia de sus respiraciones para ver si es normal. El ritmo de respiraciones por minuto común es el siguiente:

Edad de la víctima  RPM 
Mayor  12-16  
Adulta  15-20  
Joven  14-18 
Menor  30-40 

Además, si no existe riesgo de que la persona haya sufrido un daño cervical —se experimenta, sobre todo, en accidentes de tráfico, ahogamientos o caídas desde grandes alturas—, se la puede poner en posición lateral para evitar obstrucciones respiratorias. Aquí concluiría la valoración primaria en primeros auxilios y la secundaria daría comienzo: se atenderían las hemorragias, para lo que es conveniente que sepas los tipos de heridas que hay y cómo debes tratarlas.

El/la paciente no respira

Si no hay signos de que el/la paciente respire, se sigue con la valoración primaria en lugar de con la secundaria. Los primeros auxilios en este caso son:

  1. Colocarlo estirado y mirando al frente.
  2. Abrirle la boca para ver si hay algo obstruyendo la garganta.
  3. Cogerle la nuca y llevarle delicadamente la cabeza hacia atrás, flexionando el cuello.
  4. Hacerle el boca a boca si los pasos anteriores no surten efecto.

Chequeo del pulso

El último paso de la valoración primaria en primeros auxilios antes de pasar a la secundaria es la comprobación del pulso. Se hace colocando los dedos en la carótida —situada en el cuello de la víctima— para ver si el corazón está bombeando.

Si hay pulso, pero continúa en paro respiratorio, hay que seguir insuflándole aire. Si no se detecta pulso se debe hacer la conocida como Reanimación Cardiopulmonar (RCP). La página de Salud Pública del Ayuntamiento de Madrid dispone de un simulador de RCP básica para aprender la técnica de forma clara, aunque es preferible formarse con profesionales en un centro especializado.

Valoración secundaria

Ya hemos visto qué es la valoración primaria en primeros auxilios. Pero, ¿y la secundaria? Pues consiste en una revisión de todo el cuerpo del/la paciente para determinar con más claridad los daños que ha sufrido, buscando deformidades, heridas o inflamaciones:

  • Cabeza y cuello: en esta zona se investigan posibles contusiones o hemorragias. Hay que comprobar si existen problemas oculares y, si la víctima lleva algo apretado alrededor del cuello, retirarlo cuidadosamente.
  • Abdomen y tórax: ¿tiene algún objeto clavado?, ¿experimenta dolor?, ¿sufre heridas?
  • Brazos y piernas: se valora de nuevo su estado y se estimula para ver si el/la paciente continúa teniendo sensibilidad en sus extremidades.

Tras esto, también es importante revisar la historia clínica, que es el documento en el que aparecen los tratamientos y dolencias presentes y pasadas de la víctima. Entre los datos a los que hay que prestar atención destacan las alergias, las enfermedades crónicas y la pauta de medicación activa.

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